lunes, 27 de abril de 2015

La campaña directa o cómo hacer diana electoral.

 “Ajustar el punto de mira, es imprescindible para acertar en la diana”                                                                                  Arrow.

En toda campaña electoral el candidato ganador es aquel que se equivocó menos o no se equivocó, los perdedores llegaron después y se equivocaron seguro. Y es que son muchos los factores que inciden para triunfar en una contienda electoral, y sobre todo  el método y el estilo son determinantes.

En toda batalla electoral, los contendientes tratarán de usar siempre los medios tradicionales para comunicar su mensaje: los Mass Media (televisión, radio, cine), reforzados por la prensa escrita, bien sea de papel o digital, también las vallas, y por supuesto las todavía novedosas redes sociales, sobre todo el Facebook y Twitter. Este tipo de campaña también se conoce como campaña del aire, o campaña indirecta y masiva; y es una de las caras de la moneda. Claro está, el ámbito lo determina, mientras más grande sea el número de votantes y más extenso sea el territorio, más necesaria se hace la campaña del aire.

Pero resulta que para que una campaña electoral sea triunfadora, necesita casi que obligatoriamente, lo que se conoce como la campaña de tierra, la campaña directa, el face to face, la campaña puerta a puerta.

Las dos estrategias de campaña son vitales para lograr el objetivo, mientras la campaña de aire penetra y acondiciona el cerebro del elector, y lo motiva, haciendo que éste obtenga una opinión favorable del candidato, la campaña directa lo pone en acción, lo moviliza y lo termina de convencer por quién depositar la boleta de sufragio el día de las elecciones. La campaña del aire le informa al elector quién es el aspirante a gobernar, la campaña directa o de tierra se lo hace conocer, se lo presenta.

Para graficarlo mejor, es como en el ejército, la aviación y la marina (campaña indirecta), que desde el aire o del mar, pueden bombardear grandes extensiones en poco tiempo, pero necesitarán de la infantería (campaña directa) para consolidar el territorio.

La campaña directa se valdrá de elementos como el merchandising (mecheros, abanicos, muñequitos, etc.) para terminar de conectar con el elector, pero sobre todo y por encima de toda la organización, táctica y estrategia, el contacto personal del candidato con el elector es lo más fuerte e impactante que éste puede experimentar.

Que un candidato le toque la puerta de la casa a un vecino, que lo llame por su nombre, que charlen al menos unos minutos, y que se saquen una foto juntos, será un momento inolvidable que le cambiará y motivará a seguirle, convencido que este candidato es la mejor oferta. En contiendas de ámbitos locales o municipales, no usar la campaña directa es un error considerable.

Paradójicamente las primeras campañas electorales en el mundo se ganaron con la técnicas de la campaña cara a cara, con el tiempo y la aparición de la radio y la televisión se fue abandonando, y por consecuencia muchos políticos pudieron llegar al poder aunque no tuvieran las características de líderes; pero hoy por hoy, y a pesar de que existan diversas técnicas (Mass media + redes sociales), aun así la campaña directa, el puerta a puerta, el face to face, se hace imprescindible para ganar unas elecciones, para hacer una verdadera diana electoral…

Eduardo Guerra B

Analista Político y representante en España de la empresa Estudios y Organización Eugenio Escuela.



Twitter: @eduardoguerrab.





lunes, 20 de abril de 2015

Campaña electoral España 2015.
¿La estética y las formas por encima del mensaje ideológico?

Las ideologías llevan inevitablemente a la decepción, porque tienden a lo perfecto, que luego el contacto con la vida real hacen imposible.                                                                                                           
Enrique Tierno Galván.

Cuando apenas faltan unos días para ir a las urnas electorales a votar y escoger a diputados autonómicos, concejales, alcaldes  y presidentes de comunidades autónomas, las campañas electorales de cada comunidad, lucen aburridas, cansinas y vacías de contenido político. Y vale preguntarse: ¿Con campañas electorales así, cómo es posible que el índice de abstención no sea más alto?

Y es que verdaderamente no son campañas motivadoras, y no sólo por el hecho que la ley electoral únicamente permite pedir el voto por unos días al final de la campaña, sino porque lo visto hasta ahora es sólo acritud, denuncias y ataques por corrupción, ensañamiento visceral, el típico,”Y tú más…” de toda la vida.

Los partidos emergentes, PODEMOS y Ciudadanos son los que están marcando la agenda y los temas de discusión electoral, situando a los dos grandes partidos en simples seguidores, cuando electoralmente se sabe que casi siempre el partido que impone los temas es el que regularmente gana.
Prácticamente la estrategia de comunicación de los grandes(y de los pequeños también) está basada más en la cara y el arrastre de sus candidatos, quitándole peso al color e imagen de las siglas, sobre todo el Partido Popular que está sufriendo el desgaste por haber aplicado los recortes y ajustes de la economía.

Quizás le haga falta a la contienda electoral española un poco de más norteamericanización de las técnicas electorales y si eso fuera demasiado, entonces aunque sea un poco de latino americanización de las campañas, no porque sean malas las de aquí, pero si por hacerlas más alegres, participativas y motivadoras. Más música, más creatividad, más emocionales y menos agrias… pero llenas de contenido también.

Se da por válido que en toda campaña, en una primera etapa, se hable y se planteen los temas ideológicos y programáticos, sobre todo si se quiere dirigir el mensaje al voto duro del militante afiliado o simpatizante, y que luego se pase a las otras dos fases en las que se conjugue el mensaje racional con el emocional, y claro, dejar para el cierre la petición del voto apelando a los sentimientos y emociones.

Creo que es muy poco el tiempo que deja la ley para pedir directamente el voto, eso dificulta cumplir eficientemente las tres etapas o fases de la campaña.
Como resultado de estas restricciones, posiblemente veremos ciertas acciones efectistas para captar la atención del votante, algunas de ellas originales, y una muy escasa discusión programática e ideológica.

Ya hay algunas muestras de lo que se verá en la calle y en los medios de comunicación. 
Desde Madrid, Esperanza Aguirre, ha sacado a la calle un sofá de tres puestos, con unas mesitas, carteles con los logos y colores del PP,  lo que sería prácticamente un plató de TV, en el que sientan a varios vecinos del barrio, de dos en dos, para que le digan y le cuenten sus necesidades y expectativas, casi que inspirado en el programa de Risto Mejide “El Chester”.

La también popular, Cristina Cifuentes, anunció la muñequita llavero, los coleteros azules y hace poco circularon unas fotos con uno de los cinco tatuajes que tiene, en una pose sensual.
Por su parte ya está sonando en las radios extremeñas el “rap” de José Antonio Monagos, en el que se expresa el pensamiento político de éste,  y pide su reelección. En dicho vídeo clip  aparecen la cantante “Discípulo de la rima” y el bailarín de breakdance, Chey Jurado, que son “cien por cien talento extremeño”.

Estas acciones, la posible querella del PNV contra el PP porque cree que le copiaron el slogan “Trabajar. Hacer. Crecer”, algún candidato que amenaza con desnudarse y un candidato en Canarias, quien dice ser muy bueno jugando la Petanca, es lo más relevante y efectista hasta ahora.
¿Sustituirá las formas al fondo?

Esperaremos, seguramente hasta nos sorprendan positivamente…

Eduardo Guerra B.

Analista político y representante en España de la empresa Estudios y Organización Eugenio Escuela.
Twitter: @eduardoguerrab




lunes, 13 de abril de 2015

Crónica de una disolución anunciada, el UPyD de Rosa Díez.

La soberbia nunca baja de donde sube, pero siempre cae de donde subió.                                                                  
Francisco De Quevedo.

Pronosticar la disolución del partido UPyD ya no es un acto de adivinos o profetas, con sólo ver los acontecimientos que se suceden unos tras otros, le facilita a cualquier observador, acertar que después de mayo 2015, ya ese partido no existirá, al menos no como lo conocimos hasta el día de las elecciones andaluzas.

Y es una verdadera lástima, porque sin duda, Rosa Díez, logró formar un equipo humano de categoría, gente seria y preparada, que se atrevieron a desafiar al bipartidismo, consiguiendo tener presencia en toda España y ser la esperanza democrática para obligar al PSOE y al PP a retroceder en sus prácticas clientelares y corruptas.

Pero su líder fundadora no fue capaz de visualizar el cambio que se venía en el escenario político. La crisis movió a la gente, y un gran porcentaje del electorado, que  aspira un cambio verdadero, se consiguió con dos partidos emergentes, PODEMOS y Ciudadanos; partidos que han tenido la suerte de aparecer justo en este momento. Y si estos dos benjamines le están haciendo mucho daño al PP y al PSOE, qué no le harán a un pequeño partido como UPyD. Toca admitir que ninguno de los grandes partidos tampoco pudo pronosticar la aparición de estos emergentes, y siendo así, sería injusto pedirle a Rosa Díez que tuviera que adivinarlo, pero lo triste es que a ella le ofrecieron varias veces la posibilidad de unirse con C´s, incluso en diciembre de 2014. ¿Es que  Rosa Díez no leyó todas las encuestas de lo que pasaría en Andalucía?

Ciudadanos es para UPyD, lo que es PODEMOS para Izquierda Unida, quieran o no, han sido fagocitados, y por más que se resistan, los resultados en las elecciones por venir serán la tapa del ataúd que lo terminará de enterrar.

Ser un líder responsable es saber parar a tiempo, y darles paso a otros que cuenten con el apoyo de los votantes, y esta regla es aplicable a líderes de grandes o pequeños partidos. Podríamos decir que este consejo se le debería aplicar a Mariano Rajoy, pero no es lo mismo ser el Presidente del país y ejercer todo el poder, que ser la líder de UPyD, un pequeño partido de oposición, gobernado por una Presidenta cuestionada por gran parte de sus compañeros de dirección. El problema es la megalomanía, ese pecado capital que sufren algunos líderes que se niegan a dejar el poder, esos que se aferran al asiento con garras y con locura, al punto de acabar con la organización que ayudaron a formar. Son muchos los casos; aquí mismo en Canarias toca recordar eventos recientes como el del Bravo de Laguna, en Gran Canarias; Casimiro Curbelo, en la Gomera; o del mismo Paulino Rivero al no ser ratificado como candidato de Coalición Canaria.

Acusar a sus compañeros de transfuguismo, echarle la culpa a Albert Rivera de hacer una OPA hostil contra UPyD, decir que un partido catalán no va a venir a decirle a ella lo que se debe hacer, es parte de los errores cometidos por Rosa Díez.

Expulsar del partido a unos de sus líderes, a Sosa Wagner, porque éste se atrevió a exponer públicamente la conveniencia estratégica de llegar a algún pacto con Ciudadanos, solo ha demostrado el carácter soberbio de su Presidenta, la que rápidamente se está quedando sola. Como única expresión  ha admitido que el partido vive una crisis  diciendo, "De las crisis se sale. Y si se sale bien, se sale reforzado y fortalecido", el problema es que no saldrá reforzado, sino todo lo contrario.

 

El espectáculo es lamentable, ya no se ven ni siquiera las caras, son navajazos por la espalda, se expulsan y se nombran gestoras por Facebook, se bloquean los correos electrónicos, se acusan de traición, es un divorcio radio televisado, un escándalo Trading  Topic en Twitter.

 

La mayoría de los afiliados de UPyD han perdido la fe en su partido y ven la conveniencia de unirse con C´s, por eso se van; lo mismo que hizo Rosa Díez cuando se fue del PNV para el PSOE, y que luego de 30 años de militancia también abandonó para fundar UPyD. ¿Acusar a sus ex compañeros de deslealtad a estas alturas?

 

UPyD nació con Rosa Díez, y todo hace pensar que desaparecerá con ella, si es que antes no se auto expulsa, cuando esté totalmente sola.

 

Hoy por hoy, muchos dirigentes que se han ido de UPyD, ya están en conversaciones con C´s, propiciando un efecto cascada en el que terminarán por irse todos los demás, todos menos Rosa Díez…

 

Esperaremos  los resultados de las elecciones de mayo y veremos…

 

Eduardo Guerra B.

Analista político y representante en España de la empresa Estudios y Organización Eugenio Escuela.

 

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Twitter: @eduardoguerrab


lunes, 6 de abril de 2015

El Merchandising político, o cómo  transmitir una idea-mensaje a través de un objeto.

“La publicidad mueve a la gente hacia las cosas, los productos de merchandising mueven las cosas hacia la gente.”
Morris Hite.


El uso del merchandising (gorras, banderas, chapas, pines, globos, bolígrafos, abanicos, camisetas, muñecos, llaveros, caramelos, mecheros, etc.) en las campañas electorales no es nuevo, pero sí exige un grado de originalidad en su uso. Comunicar una idea o mensaje a través de un artículo de merchandising, y lograr traspasar a los electores valores y conceptos, es el reto para todo jefe de campaña electoral.

Esta técnica de comunicación pretende generar relaciones de empatía y sentimientos positivos del candidato y su partido, al elector por conquistar; y podríamos decir que está enmarcada en esa etapa emocional de la campaña (casi siempre a mitad y al final de la misma), sobre todo dirigida al gran público. La idea es que el mensaje y la imagen del candidato permanezcan en la memoria del votante, para que haga suyo los colores, símbolos y hasta los sonidos, manteniendo esa sensación de sintonía y proximidad.

En este escenario de rivalidad política de las elecciones del 2015 en España, seguramente veremos el uso del merchandising clásico, y una muestra avanzada, es la reciente propuesta de los responsables de la campaña de Cristina Cifuentes, del PP de Madrid, que encargó a China unos llaveros a imagen y semejanza de su líder, con la idea de repartirlos entre los madrileños.



La pequeña Cristina de larga coleta, vestida de blanco y azul, tipo  Play Mobil, entrará a formar parte de la galería de políticos que se han atrevido a vender su imagen tridimensional, y que conjuntamente regalarán con 50.000 coleteros azules, arrebatándole la coleta a Pablo Iglesias de PODEMOS.
En Estados Unidos, tan dados a innovar en política han explotado una diversidad de productos de merchandising, lo que en España se conoce como reclamo publicitario, pero sin duda alguna los norteamericanos siempre se han atrevido a más. Vale recordar en la campaña de 2008, que Hillary Clinton y Barack Obama protagonizaron una contienda con sus propios muñecos maniquí, los que vendían a 55 $USA, con un asombroso parecido físico, que tenían sus voces pregrabadas y sus trajes de quita y pon.


A ese evento se sumó el provocador rompenueces de Hillary Clinton,  que partía nueces entre sus muslos y que arrasó como fetiche en esas navidades.



Entre otros casos conocidos está el del ex primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, de quien se hizo un peluche, que representaba a un león con su mismo rostro y ojos rasgados; y de Venezuela,  podemos recordar el pito, tipo amolador de cuchillos, de Luis Piñerúa Ordaz en la campaña de 1978, que al soplarlo reproducía la melodía del jingle de la campaña que recordaba su nombre. Por supuesto el grotesco muñeco de Hugo Chávez, el Chavecito, un musculoso muñeco vestido de militar, con gorra roja calada y que gritaba consignas como él, y que no se callaba hasta que se desconectaba…



Podríamos citar otros casos, no todos con repercusión exitosa, pero finalmente preferimos, dada la escasez de finanzas y al control de gastos que ejercen las autoridades españolas en las campañas, (Ley Orgánica 5/1985 del Régimen Electoral General) recomendarles a los responsables de los comandos de campañas, dos consejos para que eviten malgastar el dinero y a no caer en el mal gusto:

a)     Que el producto-merchandising  tenga doble funcionalidad, es decir visibilidad tanto para las siglas del partido como para el candidato, y que también sea útil para el votante, evitando así que éste termine en el cesto de la basura.

b)     Que sea lo más original posible, ésta es la clave, la verdaderamente importante para llamar la atención del votante, con la idea que éste asuma el mensaje y la imagen del candidato.

Eduardo Guerra B.
Analista político y representante en España de la empresa Estudios y Organización Eugenio Escuela.
Twitter: @eduardoguerrab